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jueves, 7 de abril de 2011

Introducing Me •

Hoy, simplemente, quiero decirte todo lo que siento adentro. Hoy simplemente, quiero pedirte perdón una vez más por todo el dolor. Te conocí en el lugar menos esperado. En ese lugar, además de encontrar a Dios, encontré a una persona que cambiaría mucho mi vida, encontré a un amigo, que después perdí. Son tantas las cosas que siento ahora, que mientras encribo, y recuerdo todo lo que pasó, se me caen las lagrimas. Estando fuera de mí, hice cosas que nunca me voy a poder perdonar. No sé cómo pude llegar a hacer lo que hice, pero lo hecho, hecho está, y no puedo hacer nada para revertirlo. Ojalá pudiera volver el tiempo atrás, para arreglar todo esto, pero no puedo. Sé que te lastimé, sé que cometí un error grande, que de una manera u otra, arruinó la amistad tan buena que teníamos. Me doy cuenta que nunca voy a poder ser tan buena persona como vos, lo intento todos los días, tratando de cambiar mis actitudes negativas, pero como vos nunca voy a ser.
Por mucho tiempo, me sentí la peor persona que podía existir, lloré noches enteras, tratando de descubrir porqué hice lo que hice, pensando como podía solucionarlo. Pasaba el día, y la única cosa que pensaba, era en lo mala persona que era, que te había deccepcionado, y que había hechado a perder todo lo que había logrado. Sólo te quiero decir gracias por todo lo que hiciste por mí, nunca tuve un amigo tan bueno como vos, siempre que estaba mal, sacabas temas de conversación para hacerme reir, y lo lograbas, siempre tenías la palabra perfecta, y el consejo justo, siempre estuviste a mi lado, y le agradezco a Dios todos los días por haberte puesto en mi camino. Gracias por esas palabras, por esos consejos, por esas charlas, por esos abrazos, por estar siempre y nunca abandonarme, por ser quién sos, por ser un amigo excepcional.









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