¿Cuándo te hiciste tan importante? ¿En cuál de todos los besos me atrapaste, me hiciste dependiente a vos? Cada abrazo es una caricia, cada beso es tocar el cielo. Te quiero tanto, y no lo niego, me tenés ahí, haciéndome volar con cada palabra dulce. Cada paso que damos, cada vez que un secreto sale a la luz. ¿Te das cuenta que me tenés estupidizada? Llego al punto de al momento de despedirnos ya te extraño, y sigo hasta verte devuelta. Nunca pensé que me tocaría vivir así. Estaba acostumbrada a que nunca nada bueno me tocara, hasta que llegaste. Agradezco cada charla, cada tarde, cada café, cada momento en su totalidad.